¿Cuánto se puede extender el periodo de pruebas en un contrato?

02-08-2024

El periodo de prueba es una etapa esencial en muchos contratos laborales. Este periodo permite tanto al empleador como al empleado evaluar la idoneidad de la relación laboral antes de comprometerse a largo plazo. En este artículo te explicamos qué es el periodo de prueba, su propósito, las implicaciones de no superarlo, los derechos y obligaciones durante este tiempo, si es posible extenderlo y en qué tipos de contratos se puede incluir.

¿Qué es el periodo de prueba?

El periodo de prueba es un tiempo pactado al inicio de la relación laboral durante el cual ambas partes, empleador y empleado, pueden evaluar si cumplen con las expectativas mutuas. Durante este tiempo, el empleador puede evaluar las habilidades y competencias del empleado, mientras que el empleado puede determinar si el puesto y la empresa son adecuados para él.

¿Para qué sirve el periodo de prueba?

El principal propósito del periodo de prueba es proporcionar un margen de seguridad tanto para el empleador como para el empleado. Este periodo permite:

  1. Evaluar la idoneidad del empleado: El empleador puede valorar si el trabajador posee las competencias y habilidades necesarias para el puesto.
  2. Adaptación del empleado: El empleado tiene la oportunidad de adaptarse al nuevo entorno laboral y evaluar si se siente cómodo y motivado en su nuevo rol.
  3. Reducción de riesgos: Ambas partes pueden resolver el contrato sin preaviso ni indemnización si consideran que la relación laboral no es adecuada.

Si cualquiera de las partes decide no continuar con la relación laboral durante el periodo de prueba, el contrato puede rescindirse sin necesidad de preaviso ni indemnización. Esta rescisión debe comunicarse formalmente, y en el caso del empleado, este debe recibir el salario correspondiente al tiempo trabajado hasta ese momento.

Derechos y obligaciones durante el periodo de prueba

Durante el periodo de prueba, tanto el empleador como el empleado mantienen los mismos derechos y obligaciones que tendrían una vez superado este periodo. Esto incluye:

  1. Derechos del empleado: Salario acordado, seguridad social, prevención de riesgos laborales y otros derechos establecidos en el contrato y el convenio colectivo aplicable.
  2. Obligaciones del empleado: Cumplir con sus tareas, respetar las normas de la empresa y desempeñar su trabajo con diligencia.
  3. Derechos del empleador: Evaluar el desempeño del empleado y rescindir el contrato si no se cumplen las expectativas.
  4. Obligaciones del empleador: Pagar el salario acordado, garantizar condiciones de trabajo adecuadas y respetar la normativa laboral vigente.

En cuanto a extender el periodo de prueba, la duración está regulada por el Estatuto de los Trabajadores y los convenios colectivos. Generalmente, la extensión del periodo de prueba debe estar acordada en el contrato y no puede exceder los límites legales. Los periodos de prueba estándar son, para técnicos titulados, hasta 6 meses; para otros trabajadores, hasta 2 meses, y en el caso de empresas de menos de 25 trabajadores, hasta 3 meses para trabajadores no cualificados.

Cualquier ampliación del periodo de prueba más allá de lo legalmente permitido se consideraría nula, manteniéndose el trabajador como fijo en la empresa una vez superado el periodo máximo establecido.

Tipos de contratos que pueden incluir periodo de prueba

El periodo de prueba puede incluirse en diversos tipos de contratos laborales, tales como:

  1. Contrato indefinido: Permite evaluar la compatibilidad del empleado con el puesto antes de formalizar la relación a largo plazo.
  2. Contrato temporal: A pesar de su duración determinada, puede incluir un periodo de prueba para asegurar la idoneidad del trabajador.
  3. Contrato en prácticas: También pueden incluir un periodo de prueba para verificar las habilidades del trabajador recién titulado.

El periodo de prueba es una herramienta valiosa para asegurar que tanto el empleador como el empleado están satisfechos con la relación laboral antes de comprometerse de manera definitiva. Conocer los límites y las condiciones de este periodo es esencial para ambas partes, garantizando que se respeten los derechos y obligaciones y se cumpla con la normativa laboral vigente.